Gafas o lentillas: ¿cuál es la mejor opción?

Las gafas graduadas suelen ser la respuesta más inmediata. Tradicionalmente, todos pensamos en las gafas para corregir un defecto refractivo. En cambio, en la actualidad las gafas han pasado a ser también un complemento más allá de una herramienta para mejorar la vista.

Nosotros creemos que el uso de las gafas como alternativa a las lentillas puede ser positivo en determinadas ocasiones. Te proponemos que uses las gafas como descanso de las lentillas o en situaciones en las que el uso de gafas puede ser más práctico. Sin embargo, usar gafas como única solución puede resultar algo limitado.

Las gafas tienen un campo de visión más reducido: al estar acotadas por los cristales y la montura no te permiten tener una visión totalmente corregida en todos los ángulos. Además, las gafas graduadas implican una mayor inversión económica y son más complejas de sustituir. Practicar deporte y algunas actividades de ocio con gafas puede ser una pesadilla.

Como ya habrás podido comprobar, no se trata de elegir una cosa o la otra, sino de combinar ambas y usar cada una en determinados momentos. Además, es importante que siempre sigas el consejo de tu oftalmólogo para conseguir el mejor estado para tu salud ocular. Nosotros apostamos por un uso cotidiano de las lentillas, combinado con las gafas como alternativa en determinados casos.

Tanto si es tu primera vez usando lentillas como si eres un usuario experto, te presentamos algunos consejos para hacer del uso de lentes de contacto una experiencia muy sencilla.

• Pásate a las lentillas diarias: Si sufres el síndrome del ojo seco y además usas gafas en algunas situaciones, las lentillas desechables son perfectas para ti. Las lentillas diarias no requieren de ningún tipo de rutina de cuidado, por lo que resultan sencillas y cómodas de usar. Las lentillas desechables son muy transpirables y cómodas, ya que las puedes reemplazar en cualquier momento por un par nuevo. Nuestros ópticos recomiendan las lentillas everclear ELITE, con una gran hidratación, que permiten que tus ojos estén y se sientan sanos en todo momento.

• Cuidado e higiene: Cualquier tipo de actividad que implique un contacto directo con los ojos requiere tener unos hábitos de higiene básicos para evitar infecciones oculares. Lavarse las manos con agua y jabón es un paso imprescindible antes de ponerte y quitarte las lentillas. Las láminas de jabón de Vision Direct son perfectas para estas situaciones.

• Periodo de adaptación. Cuando usas lentillas por primera vez o cambias de lentillas es normal pasar por un periodo de adaptación. Es importante seguir el consejo de tu oftalmólogo y acudir a él en caso de tener cualquier duda o molestia.

• Hazte una revisión oftalmológica cada 2 años: Es importante acudir a un especialista de la vista cada dos años para asegurarte de que tu receta de lentillas está actualizada. Con tu visita a un profesional de la salud ocular podrás prevenir problemas de visión.

• Lleva siempre a mano un bote de lágrimas artificiales: Si usas lentes de contacto puedes padecer el síndrome del ojo seco. Ante esta situación, tu mejor aliado serán las lágrimas artificiales. Nosotros te recomendamos las lágrimas artificiales everclear para conseguir un alivio inmediato.

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